miércoles, 9 de mayo de 2012

Día 24: Devorador.

Esta mañana se ha bebido, literalmente hablando, un bote de papilla para bebés, de 250ml. Ya está más animado e incluso recién “levantado” se atreve con lo que le echen aunque, por cuestiones de tiempo, me interesa más darle el potito porque se lo come antes y no llego tarde al trabajo. Como por la mañana no me he atrevido a dejarlo en la azotea por la amenaza de lluvia, por la tarde, después de darle de comer y curarlo (se ha zampado más de media lata de albondiguitas, marca ACME), lo he subido a su “ático” y allí ha estado hasta que he vuelto de la piscina, ya de noche. Estaba perfectamente allí arriba, muy a gustito sobre una sabana absorbente, acostado en una de las bandejas del taburete que tiene dentro de su apartamento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario